Nos obsesionamos con no fallar, nos pasamos la vida evitando errores; estamos tan preocupados por no fracasar que no arriesgamos, no intentamos nada extraordinario, por lo que rara vez hacemos algo de importancia. Y todo esto no nos lleva más que a sentirnos insatisfechos o frustrados.
Y sin embargo en esta vida triunfan quienes cometen errores espectaculares, los que se atreven a hacer algo grande, nuevo o diferente, personas que cada vez que se equivocan aprenden de sus errores y dan un paso hacia la excelencia. Y es que para hacer algo extraordinario, uno tiene que estar dispuesto a fallar.
Ya lo dijo T. S. Eliot: "Sólo aquellos que se arriesgan a ir demasiado lejos pueden descubrir hasta dónde se puede llegar".
Ya lo dijo T. S. Eliot: "Sólo aquellos que se arriesgan a ir demasiado lejos pueden descubrir hasta dónde se puede llegar".
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